La formulación de COBRESTABLE permite la absorción y translocación del cobre dentro de la planta. Esto nos da la posibilidad de incorporar al cobre como nutriente, cuya función es clave para la prevención de enfermedades.

Todos los microelementos metálicos son deficitarios por génesis en los suelos de pedemonte, no porque la base mineral no se encuentre sino vinculados a aspectos de textura (más arenosos y/o pedregosos), a la presencia de carbonatos y a la falta de materia orgánica y coloides a los cuales, en caso de estar presentes, se adsorben. Aún en caso de contar con algún suelo de textura un poco más fina, la presencia de carbonatos anula totalmente la disponibilidad.

En este sentido la carencia de cobre, como nutriente, impacta fundamentalmente en los aspectos vinculados a la defensa pasiva de la planta, en especial a la formación de ligninas, que son los compuestos que le dan rigidez a lo tejidos.

La lignina por su composición no polisacárida no puede ser atacada por las enzimas degradadoras de azúcares de los invasores (poligalacturonasa). De esta manera actúa frenando no sólo el avance de los microorganismos como una barrera física sino que más lignina se traduce en mayor resistencia. El calcio ayuda a unir las células por medio de la formación de paredes celulares mientras que el cobre (vía la formación de lignina) les da la rigidez necesaria para solidificar los tejidos.

A su vez la formación de lignina potencia el cuaje a través de una mayor liberación de polen ya facilita la ruptura de las anteras.

En los primeros estados fenológicos, por el rápido crecimiento inicial los que los tejidos quedan expuestos constantemente al ataque de patógenos (en caso de la vid peronóspora, oídio y botritis). En este marco y por las características de penetración de COBRESTABLE, optamos por el enfoque nutricional del manejo de las posibles enfermedades. De esta forma, con aplicaciones a bajas dosis (2 a 3 lts/ha) durante los primeros estados y hasta post-cuaje estaremos predisponiendo mejor a la planta contra estos patógenos.

Después del cuaje y frente a las condiciones predisponentes, optamos por BORDOCALD.

BORDOCALD ha sido desarrollado para cumplir exclusivamente la función fungicida-bactericida.

La principal característica de BORDOCALD está centrada en que es un caldo bordelés listo para usar y totalmente estable, compatible y gran poder residual.

Las ventajas de estabilidad, compatibilidad y residualidad están asociadas a la micro y nano granulometría que le otorga el proceso de formulación que hemos desarrollado, lo que permite un mayor grado de cobertura y una mayor adherencia a la planta.

En pre-cosecha (5 a 7 días antes) recomendamos la aplicación de COBRESTABLE con el solo objetivo de elevar los tenores de nitrógeno amoniacal y cobre de las bayas para favorecer el proceso de fermentación de algunas variedades y para regular la química del azufre durante la fermentación y guarda respectivamente.